En Villarén se conservan tres pilones y un lavadero así como una de las fuentes “cántabras” más antiguas conocidas.
Villarén tuvo en el pasado (hacia 1850) ayuntamiento propio, muestra de ello son las placas con la leyenda de “Anejo de Villarén de Valdivia” que aún se conservan en Villaescusa y Quintanilla de las Torres.
Desde 2005, en diciembre, un grupo de vecinos del pueblo instala por sus calles un original Belén fabricado por ellos mismos.
Se conservan en Villarén tradiciones religiosas como un “Vía Crucis” cantado y “La Procesión del Encuentro”. Dicha procesión se realiza el Domingo de Pascua por las calles del pueblo con las imágenes de Cristo resucitado y la Virgen María.
En los alrededores del pueblo se pueden ver aún tres “casetas” utilizadas hasta no hace mucho para guardar los aperos de labranza utilizados sobre todo para la recogida de cereales.